capitulo 4

Gabriela y Augusto no salen hasta bien pasada la tarde en la que ella insiste en pasar un rato con los niños. Los 4 juegan tranquilos pero los niños no se fian del todo. Cenan los 4 en familia en la cocina.
--es mas calido --dice ella.
ASi evitan al padre de Augusto que se niega a comer en la cocina pero no le saca los ojos de encima a la que cree su nuera. Luego Gabriela los va acostar. Los besa en cariño. Los niños se van mirando preguntandose que tramarà ahora su malvada madrastra. Augusto mira a su esposa emocionado. Al fin en su hogar se disfruta de la armonía que él siempre deseó. Besandose y acariciandose (ante la celosa mirada de Augusto padre) Augusto y Gabriela se encierra en su dormitorio. Y hacen el amor. Y es la tercera y estan felices el uno en brazos del otro. Augusto padre desde la puerta escucha los jadeos, las risas. No entiende nada. Se queda en su dormitorio fumando desnudo. Esperandola... Y se cansa de esperar. Gabriela le sube el desayuno a su marido a la cama. Luego lo acompaña hasta la puerta mientras se va a trabajar. Lo despide con un beso. Gabriela hace exactamente lo que siempre Augusto deseó que le hiciera su esposa y nunca habia logrado. Està gratamente sorprendido.
--te amo --dice el.
--yo tambien te amo --dice ella.
Lo dice porque siente que debe hacerlo y porque esa mirada se lo trasmite. Augusto está fascinado por esta nueva Paulina. Gabriela se queda en la puerta mirandolo hasta que se va. Gabriela se hace cargo de la casa,
--espero que me digan en que les puedo ayudar --dice a las sorprendidas mucamas.
Al ver que una vas a llevar a los niños a la escuela ella toma su lugar. Los niños van con ella, que los toma de la mano. Se muestran asustados. Ella actua con normalidad. Les habla de todo y de nada. Al llegar a la casa, Gabriela dice a la cocinera:
--Voy a refrescarme un poco y le ayudo con la comida...
Todas se preguntan:
--¿y que le ha pasado a la señora Paulina?
Gabriela va hacia su cuarto. En el pasillo, Augusto padre abre la puerta de su cUARTO y sin avisar agarra a la joven y se la mete en el cuarto y la besa. Indignada Gabriela bofetea a su supuesto suegro:
--¡¿¿esta loco? ¿¿que hace?¡
Augusto la abraza y la aferra a su cuerpo:
--Me gusta que me peguen antes de hacer el amor...
La quiere tirar a la cama pero ella se aparta de èl.
--¡¡no me vuelva a tocar...¡
Ella va hacia la puerta. Augusto se enfada:
--¡¡aunque quieras jugar a la esposa perfecta yo sé que en la cama me prefieres a mí...¡ ¡¡¿o es que has olvidado como despues de hacer el amor con mi hijo te metias en mi cuarto para que te dejara satisfecha?
Gabriela no puede creer que Paulina no le dijese que fue amante de su suegro. Esta horrorizada por lo que ha descubierto. Por esa traicion del padre como de la esposa a un hombre tan dulce y tierno que aún cuando recien lo conoce ya le ha llegado al corazon. Gabriela no da crédito a lo que oye.
--¡¡no puede ser¡ --dice.
Augusto se enoja:
--¡¡no hagas como si nada...¡ ¡¡porque fuiste tú la que te metiste en mi cama la misma noche de boda y no has faltado ni una sola noche¡ ¡y me consta que no he sido tu unico amante¡
Él la quiere acariciar mientras le dice apasionado:
--a lo mejor has olvidado mis besos pero yo te harè disfrutar más que mi hijo.
Gabriela no deja que se le acerque. Lo bofetea:
--¡¡el pasado esta muerto para mi. Soy la mujer de su hijo y le exijo que me respecte¡
Augusto se le rie.
--es broma ¿no?
Ella esta muy seria. Èl se enoja:
--¡¡me dijiste que Augusto era muy malo en la cama, que yo te gustaba más...¡
Gabriela esta escandaliza tanto por la actitud del padre como la del hijo.
--¡¡no le quiero escuchar mas¡
Ella se iba a ir pero èl la estrecha entre sus brazos. Le hace sentir todo su cuerpo. La quiere besar. Ella siente asco. En una mezcla de seduccion y amenaza dice:
--esta noche te espero en mi cama o le cuento todo a mi hijo...

Virginia esta cantando una nana a su hijito. Adrian entra en el cuarto desnudo y humedo. Recien sale de la ducha. Abraza a su mujer por la espalda. Ella se gira y se besan enamorados. Èl la mira y la acaricia dulcemente:
--me produce tanta ternura verte tan dulce con el bebé... Eres una gran madre...
Ella lo besa feliz. Èl tiene una sombra de tristeza en la mirada:
--no sabes como lamento no haber sido capaz de darte el hijo que tanto deseabas.
Ella le da un tierno beso:
--te amo... te amo y quiero a este bebe como si hubiera nacido de mi vientre...
Virginia toma las manos de su emocionado marido y se las pone en el vientre:
--Adriancito es como si fuera nuestro hijo.
--No sabes como te amo --dice él emocionado.
Ella sonrie. Se besan felices. Adrian la besa en las manos.
--Para mi ha sido un gran gesto de amor que le hicieras creer a todo el mundo que la esteril eres tú --se entristece-- yo no quiero que mi familia sepa que no soy un hombre entero... Me moriria de la pena con mis padres, mis primos, mis tios... No quiero que nadie se ria de mi.
Ella le seca una lagrima, luego lo abraza:
--eres un hombre y me lo has demostrado... Eres un amante perfecto... --dice mientras le acaricia el pecho y lo besa en el cuello.
A Adrian le emociona el amor de su esposa pero no le satisface del todo sus palabras:
--¿como sabes que soy tan buen amante si no has conocido otro hombre?
Ella lo mira enamorada mientras lo va arrastrando a la cama:
--No necesito haber conocido a otro hombre para saber que tu me llenas por completo, que contigo no necesito nada mas.

Gabriela le da una patada en los testiculos a Augusto padre y mientras éste se retuerce de dolor ella le dice furiosa:
--¡¡tanto usted como yo vamos a olvidar lo que ha pasado y nos trataremos como lo que somos...¡¡¡suegro y nuera¡
El hombre con sus manos en los genitales y lleno de furia le dice:
--¡¡te espero esta noche... no me vas a tomar el pelo...¡¡¡ ¡puedo arruinar tu matrimonio cuando se me pegue la gana¡
Ella sale alterada. Justo en la puerta se topa con unas empleadas que pasaban. Ellas se miran complices y comentan:
--hay personas que no cambian nunca...
--si a mi no me habia engañaba...
Gabriela se encierra en su dormitorio dolida por lo que ha pasado. Se mira al espejo:
--¿¡¡que clase de monstruo eres Paulina?¡
Tiene el rostro desencajado por la rabia. Su primera reaccion es agarrar su maleta para irse pero mira la cama en la que tan feliz ha sido. Se derrumba. Acaricia las sabanas con amor. El recuerdo de los besos y las caricias del marido de Paulina la anima a seguir con el compromiso que cada vez le cuesta menos cumplir. Piensa en Augusto hijo y se entristece.
--No se merece este engaño...
Y aunque no haya sido ella quien lo ha traicionado le doleria mucho que se descubriera todo y èl se enojara con ella.